martes, 24 de enero de 2012

Ajedrez... ganar, perder...

Ayer no salí a almorzar. La máquina virtual en donde estaba realizando la tarea que tengo asignada estaba bastante lenta -sobrecargada- y me atrasé bastante con la asignación. Almorcé los panitos que me sobraron del desayuno en mi escritorio. Salí un poco antes de las 6:00 y me dirigí al club de ajedrez en el que se está desarrollando el campeonato. Mi primer contrincante fue uno de los que están a mi nivel -entre los participantes está el campeón nacional- pero perdí -otra vez un descuido muy básico- la reina casi al inicio de la partida. Perdí. Contra el otro contrincante ya había perdido en el campeonato anterior. Su nivel está un poco sobre el mío -pero no mucho- logré quitarle temprano una torre pero en el desarrollo del juego fui perdiendo muchas piezas. Al menos sentí que desarrollé mejor la partida. Llevo cuatro pérdidas al hilo. Espero estar aprendiendo a poner más atención a las amenazas.

Me retiré del club italiano -allí se reuné el club de ajedrez- un poco antes de las 9:00 para abordar el transmetro, el grupo aún continuaba reunido. Continué en mi habitación leyendo Los Hombres que no Amaban a las Mujeres, espero terminarlo esta noche. Hoy me levanté un poco después de las 6:00. Llevé avena y unas salchicas al trabajo. Desayuné lo de costumbre, avena y panito y almorcé una de esas sopas de vaso con salchicas y un aguacate que salí a comprar al mediodía. Y un platano.

Terminé -por fin- con la asignación que había tenido entre manos desde la semana anterior y me pasé a una nueva tarea. Salí del trabajo a las 7:00, pasé al supermercado a comprar unas zanahorias y pasé a la panadería a comprar pan pero ya no había. Planeo no dormirme muy tarde.

El martes de la semana pasada mi ex esposa me llamó para que llegara a su casa y conversáramos. Me molestó el hecho de que me convocara -a una hora en que los chicos estaban aún despiertos- para decirme que no iba a 'ayudarme' con las facturas que necesito para la planilla del iva de este año. Tendré que buscar otra forma de proveerme de las mismas pero le comenté que el otro año llevaría el caso a un tribunal pues la mayor parte de mi dinero se va en ese rubro.

El miercoles Rx me llamó para comentarme que andaba por la universidad y pedirme prestado dinero. Creo que el equivalente a quince dólares no empobrece a nadie. Vino un rato a mi habitación, conversamos un poco y luego le entregué el dinero que me había pedido. Se fue bastante rápido.

El sábado me llamó mi papá. Iba por una calle muy transitada -y riesgosa- pero estuvimos conversando un poco. Me comentó que ya había visto el video que habíamos preparado con mis chicos el día de navidad.

Novela negra...

A veces me es difícil entender la forma en la que se cataloga a los libros. En alguna parte leí que Sin City y Pulp Fiction eran películas basadas en novelas negras. Había visto La chica del Dragón Tatuado en alguna parte y vi que era parte de una serie en la que se incluía La chica que soñaba con un bidón de gasolina y una cerilla, al leer la contraportada del segundo me pareció muy deprimente el argumento y me dije que pasaba. La semana pasada estrenaron la película basada en Los Hombre que no amaban a las mujeres, bajé los tres libros el martes o miercoles pasado y hoy espero terminar de leer el primero de la serie. Si, es novela negra.

El domingo pasado por la ncohe planché cuatro camisas. Había estado planeando -desde que compré otra jarrilla eléctrica- empezar a planchar una vez a la semana y utilizar mi vieja jarrilla para preparar huevos cocidos y llevar eso una vez a la semana como almuerzo. El domingo pasado fue el único que realicé lo del planchado semanal.


El lunes pasado empezó el campeonato de ajedrez para el que me había anotado dos lunes atrás. Serán dos partidas de media hora cada una todos los lunes -no se cuantos lunes tardará-. La primera partida fue contra alguien a quien había visto hace muchos años en la facultad, en el área de ajedrez y como parte de un grupo que se pasaba una gran parte del día jugando. La perdí completamente. En la segunda partida perdí mi reina en un descuido muy básico. Ese día mi jefa llevó el desayuno y almorcé avena.

El martes llevé panitos con huevo y salchicas para almorzar. Al mediodía fuí al supermercado que queda cerca de mi trabajo a comprar unas sandalias. No había. El miercoles me tocó que ir al colegio nuevamente pues el día anterior se nos había enviado un correo para entregar ASAP la planilla anual de impuestos. El contador no aceptó la carta de comprobación de pagos que me habían extendido y tuve que ir a pedir una copia de las facturas (2) del año. Aproveché para pagar tres meses de colegiatura. No almorcé y por la noche pasé a comprar un asado al puesto que queda cerca de mi casa.


El jueves almorcé fruta, melón. En la noche nos reunimos con mi grupo del sábado por la noche para celebrar el cumpleaños de una de las voluntarias. Volví a cenar asado y a las 11 que retorné a mi habitación me conecté con la computadora de mi trabajo para tratar de adelantar algo en una asignación bastante extensa en la que he estado trabajando desde el principio de la semana.


El viernes fuí a otro supermercado que queda cerca de mi oficina. Compré un par de snadalias y una papaya. Retorné a almorzar a mi oficina. En la noche nos volvímos a reunir -por tercer viernes consecutivo- para jugar futbol de sala. Terminamos como a las 10:00, el compañero B me dió aventón a mi casita y lo invité a cenar: asado. El sábado empezó el semestre de visitas, con mi grupo de la mañana nos tocaba ir a Antigua pero al ver que habían suficientes voluntarios, era muy lejos el lugar y otro grupo estaba con casi el mínimo le avisé a mi encargado que me iría con el otro grupo. Visitamos un asilo de ancianos de 10:00 a 12:00. Después de la visita retornamos al comedor de costumbre y yo me dirigí al lugar en el que nos reuniríamos con el grupo de la tarde. Con la mayoría del grupo de la mañana ya había visitado, del grupo de la tarde no conocía a ningún voluntario.

Nos reunimos en Taco de la zona 4 en donde almorcé y nos dirigimos a la visita en un orfanato de la zona histórica. Estuve con un grupo de 4 o 5 niños haciendo varias figuras de origami. Después de la visita la encargada del grupo nos pasó a dejar a Miraflores y llamé al voluntario que vive en la misma colonia para ver si iba a ir a la celebración del cumpleaños de la cumpleañera del jueves -esta vez en su casa-. El voluntario pasó por mi al comercial, retornamos a su casa y luego nos fuimos a la celebración. Asado nuevamente, también karaoké. Terminamos un poco después de las 11:00.


El domingo me levanté un poco después de las 8:00, me quedé leyendo un rato en mi camita y luego hice la limpieza. Fuí por mis chicos a las 9:30 y compramos pollo, carne para asar y chorizos. Nos estuvimos en la mañana en mi habitación, ellos jugando en las computadoras y con el cubo de rubik y yo revisando los diarios que he pedido que lleven durante la semana. Preparamos un muy buen asado y por la tarde fuimos a jugar un rato a la universidad. En la biblioteca encontré el libro que estoy leyendo en la computadora y estuvimos allí casi hasta las 5:30.

Retornamos a mi habitación a ver quince minutos de Piratas del Caribe 3 y los fuí a dejar un poco antes de las 6:30. Retorné a mi habitación a continuar leyendo, había planeado también planchar las camisas pero empecé a dormitar un poco antes de las 7:00. Me desperté como a las 8:30 y luego como a las 10:30. Me levanté a lavarme los dientes y continué durmiendo hasta las 4:30 AM. Me levanté a las 5, planché, preparé panitos, leí aún un poco del libro de Larsson, me bañé y entré a las 7:00 a mi oficina. Se suponía que nos reuniríamos con mi jefa a esa hora pero ella llegó como a las 8 menos cuarto.

lunes, 16 de enero de 2012

Libros a medias (II)

El sábado pasado intenté devolver los libros que tenía de la biblioteca del CCEG pero al llegar a la misma estaba cerrada. Aprovechando que estaba cerca de la biblioteca del IGA pasé a terminar de leer El Leproso -un libro sobre el retorno de un inmigrante a Guatemala-, que había dejado a medias hacía casi un año. Eso me recordó de un libro que nunca terminé de leer -y ya no me interesa- sobre la represión a los cristianos en los países comunistas. Había yo acompañado a una tía a una aldea en lo más recóndito de Izabal y nos dieron posada en la casa de un pastor. A mí me tocó quedarme a dormir en la habitación del hijo del señor -tenía mas o menos mi edad- y llegué hasta la madrugada leyendo el libro. Un poco después de medianoche llegaron a apagar la luz y me hice el dormido. Nunca terminé el libro.

El domingo que llegué por mis chicos e encontré con que mi hija segunda se había cortado el pie, así que no podía caminar mucho. Habíamos planeado ir a depositar a las cuentas pero decidimos quedarnos en casa. Estuvimos jugando en la computadora y al mediodía fuimos a almorzar -pollo frito- a los campos de la universidad.

El lunes entré a las 6:00 pues había quedado de reunirme con mi jefa temprano. Salí a las 5:00 y fuí a un torneo de ajedrez al club italiano. Era un torneo de 9 rondas de cinco minutos. Perdí las primeras cuatro, descansé una ronda y gané las últimas cuatro. El martes por la noche compré zanahorias en el supermercado y el miercoles y jueves almorcé ensalada de zanahoria y atún. Estuve saliendo toda la semana entre 5:30 y 6 y caminando directamente a mi casita. No tomé cena en toda la semana.

El viernes no había traido almuerzo y no se me antojó comprar algo preparado. A la hora de la comida bajé al supermercado que queda a tres calles del trabajo y compré una papaya, dos bananos y una manzana. Retorné a la oficina en donde pelé la papaya y almorcé casi solo eso. Incluso regalé unas pequeñas porciones a los compañeros que estaban en la cocina. En la noche fuimos a jugar futbol de sala, de 9 a 10. Después del partido el compañero B y su esposa pasaron a dejarme a mi casa. Me regalaron media porción de Wantan.

El sábado me levanté temprano a lavar un baño de ropa que había dejado en remojo el día anterior. Después del lavado pasé al mercado por mis tenis blancos -los había dejado el sábado anterior para que les cambiaran la suela-. Es gracioso que el cambio de suela me costó un poco más que lo que me costaron los zapatos en Portland -usados-. Sin embargo, de comprar otro par de tenis me hubieran salido en el triple de lo que pagué. Después del mercado me dirigí a la casa del voluntario que vive en la misma colonia.

Habíamos quedado con mi nueva amiga del voluntariado en ir a devolver los libros, comprar unos tableros de ajedrez y pasar a pagar su internet. También ver la película de Los Muppets. Con el voluntario que vive en la misma colonia pasamos a traer a nuestra amiga al edificio en el que trabajo. Fuimos a la biblioteca del CCEG -no estaba la bibliotecaria- y luego fuimos al mercado central, en donde había visto hacía algunos meses unos tableros de ajedrez chinos bastante baratos. El centro estaba bastante lleno por el cambio de gobierno, pero pudimos realizar las compras sin ningún contratiempo. Después de comprar los tableros nos dirigimos al edificio en el que trabajo para que mi amiga pagara su factura de internet. Nos quedamos un rato en el food court del edificio, jugando ajedrez.

Un poco después del mediodía nos dirigimos a la casa del voluntario que vive en la misma colonia a almorzar -pollo y pizza- y por la tarde vimos la película de Los Muppets. Después de la película fuimos a dejar a nuestra amiga a su casa y con el voluntario retornamos a la colonia. El grupo de voluntarios de los sabados por la noche llegó a la casa del voluntario y estuvimos viendo Misión Imposible III y cenando -ellos, pues yo había comido demasiado en el almuerzo-. Un poco antes de las 11:00 una de las voluntarias me pasó a dejar a mi casita.

Ayer me levanté como a las 8:30 y salí a lavar un poco de ropa que había dejado en remojo el sábado por la noche. Ordené mi habitación y fuí por mis chicos. Desde el sábado pasado estoy turnándolos entre las dos computadoras y resolver dos cubos de rubik. Se están demorando entre 10 y 15 minutos en resolver los dos cubos y ese es el tiempo en el que deben turnarse con las computadoras. Un poco antes del mediodía nos dirigimos a la cooperativa en la que tienen una cuenta de ahorros y les dí el resto de dinero que les enviaron mis papás -y un poquito que puse yo- para que lo depositaran en las cuentas -menos un porcentaje que siempre les queda en efectivo-.

Después de la cooperativa pasamos a comprar una pizza y nos dirigimos a la universidad. Luego de almorzar estuvimos jugando una partida en simultáneo. Estoy enseñándoles a anotar las partidas de ajedrez y ayer fue la primera vez que completaron una partida anotada. Después de terminar la partida estuvimos alrededor de media hora en la biblioteca y luego retornamos a mi habitación. Mis chicos me ayudaron con los trates sucios y luego vimos 10 minutos de Piratas del Caribe III. A las 6:20 los fui a dejar a su casa.

La semana pasada -miercoles o jueves- compré una nueva jarrilla eléctrica. Creo que no estoy consumiendo suficiente calcio y espero poder cocinar unos huevos a la semana en la antigua jarrilla -lo había hecho varias veces hace un par de años-. Compré la nueva para no usar el mismo trasto con el que preparo el té que usualmente tomo. Como utilizaré un poco más de electricidad decidí que ya no voy a estar planchando diariamente la camisa diaria, como he estado haciendo desde hace bastante tiempo. A partir de esta semana plancharé una vez a la semana -domingos por la noche- y usaré la jarrilla de los huevos una -o dos- veces por semana. Anoche después de ir a dejar a mis chicos retorné a planchar las cuatro camisas de la semana. Me dormí un poco después de las 10:00 pues debía de levantarme a las 4:30 para entrar a mi trabajo a las 6:00: además de la reunión semanal debía empezar con una tarea bastante temprano.

sábado, 7 de enero de 2012

Libros a medias (I)...

En mi primer viaje a Portland dejé a medias un libro que estaba leyendo en la biblioteca del condado. Se llamaba Transportes González e hija -o algo así- y era la historia de una presidiaria que les lee a sus compañeras de encierro -ella es estadounidense pero estan en una carcel mejicana-. Ella no les lee realmente, supuestamente la mayoría no saben leer y ella toma un libro por cualquier página y va contando su vida, hasta llegar a la prisión. Me pareció interesante la historia pero estaba leyendo bastante inglés en esa época. Cuando retorné al año y medio siguiente -mi segundo viaje- retomé su lectura y me gustó el final. Antes de venirme por última vez de esa ciudad -la tercera es la vencida- estaba leyendo un libro en inglés, en un lugar en donde hacía trabajo voluntarios, se llamaba Tatoo Bangkok -o algo así- y estaba bien interesante. Espero poder terminarlo de leer algún día, creo que leí hasta la cuarta parte o algo así.

Ayer me levanté más tarde que el resto de la semana. Entré a mi trabajo a las 7:30 y desde temprano mi jefa me cambió de asignaciones, indicándome un reporte mucho más extenso y complicado que en el que había estado trabajando los dos días anteriores. Traté de avanzar pero se me hizo cuesta arriba. Incluso no salí a almorzar -no había llevado almuerzo, no había agua caliente para preparar una sopa y no tenía animos de bajar a comprar algo- sino que me quedé en mi escritorio comiéndome unas lonjas de jamón y tratando de darle seguimiento a la tarea entre manos. También había planeado pasar a cenar a la casa del voluntario que vive en la misma colonia pues mi nueva amiga del voluntariado me había dicho que iba a estar allí por la noche.

También se había planeado un partido de futbol de sala con los compañeros de la oficina para la noche del viernes. Estuve en el día sopesando a cual acudir y al principio ni siquiera lo había considerado. Estaba seguro de que ir a cenar con el voluntario de la colonia, mi nueva amiga del voluntariado y Mv era la mejor opción. Sin embargo, los ánimos cambiaron por la tarde y le indiqué a mi amiga que iba a estar trabajando hasta tarde -lo que en parte era verdad-. Le comenté a mi jefa que iba a trabajar hasta las 7:00 y me quedé en la oficina hasta las 8:00. Hora en la que el compañero B, P, otro compañero de la oficina y yo nos dirigimos a la cancha de grama sintética. Habían confirmado como 10 o 12 compañeros y amigos. En el camino aún pasamos a una gasolinera en donde el compañero B y P se tomaron dos o tres cervezas y yo me comí un hotdog -la primera comida desde el desayuno-.

Jugamos como de 9 a 10 en una cancha sin techo. Al menos la gramilla sintética estaba en muy buenas condiciones. Al final llegamos casi 20 jugadores y nos dividimos en tres equipo. Jugamos alternativamente contra el que metiera el gol. Debo decir que después de exactamente un año de no participar en una de estas actividades mi rendimiento estuvo bastante pobre. No obstante corrí, pateé y grité todo lo que pude. Alternativamente estuvimos tomando turnos para entrar y descansar con el compañero B.

Después del partido se había planeado un after, me gusta que mis compañeros y amigos respeten el hecho que yo ya no tomo y aún así no haya roces en estas reuniones. Con el compañero B y el otro compañero de la oficina nos dirigimos a una estación gasolinera cerca del obelisco. Pasamos dejando al otro compañero al lugar en donde debía tomar un taxi hacia su casa y estuvimos en el área de comida de la tienda de conveniencia de la gasolinera hasta un poco después de la una. El compañero B y P siguieron tomando -otras cuatro o cinco cervezas-, junto al data master de la oficina. Otro excompañero de la oficina y su hermano cenaron hotdogs y yo me tomé un capuchino con un pastelito. Como a las una y media de la madrugada pasó a dejarme a mi casa el compañero B. Aún estuve viendo una parte de una película -5 days of war- que me había prestado el voluntario que vive en la misma colonia. Me dormí un poco después de las 2:00 y puse la alarma para las 7:00. Me levanté casi a las 8:00 y puse un baño de ropa en remojo.

Las cabañuelas...

Me enteré de las cabañuelas el año en el que empecé la convivencia con mi ex esposa. Llevábamos un año de estar saliendo y como estaba viviendo sola -su madre murió a finales del año en que empezamos a salir- pasé varias noches en su casa a principios de año. La primera semana vi que estaba escribiendo algo en un calendario de pared y al preguntarle me comentó que, según 'las cabañuelas' cada mes del año tendrá un día similar a los primeros doce días de enero. Interesante la teoría. No le dí mucha importancia realmente. El lunes o martes de este año leí en twitter a alguien comentando sobre las cabañuelas y proponiendo que si no sabían que eran les preguntaran a sus abuelas.

Si se cumplen las cabañuelas este año, tendremos un enero soleado, un febrero de lloviznas y los meses de marzo, abril, mayo y junio con mucho frío. Julio ya estará calmándose el frío. Habrá que ver que tan preciso es el pronóstico.

El miercoles sali un poco antes de las 6:00, habia entrado temprano para continuar trabajando con un reporte que estamos elaborando con mi jefa. Llevé de almuerzo ensalada de zanahoria y atún. Este día almorcé con mi amiga de la Antigua con la que fuí a almorzar hace unos meses a esa ciudad. Andaba -para variar- con problemas del corazón. Cuando estaba regresando a mi habitación me encontré a mi prima favorita y a su esposo y conversamos un momento. Ha estado haciendo bastante frío.

El jueves entré nuevamente temprano, para trabajar en un reporte que está bastante extenso y que debo redactar únicamente yo. Almorcé lo mismo que el miercoles pero lo hice en mi escritorio. En la mañana me había llamado MV para ofrecerme algunos recibos que podía utilizar en mi declaración de impuestos por lo que a las 4:30 que salí me dirigí en transmetro a su lugar de trabajo. Llegando estaba a la colonia en donde estan las oficinas cuando me llamó para decirme que se dirigía a un lugar cerca de mi trabajo. Al final retornó y nos encontramos en una estación del transmetro cercana a su trabajo. La acompañé en transmetro hasta la última estación, que es por donde vive y luego retorné a mi casita. No había cenado durante todo el año y continué igual.

miércoles, 4 de enero de 2012

Beginning 2012…

El domingo me levante temprano, alrededor de las 8:00; ordené mi habitación y fui por mis chicos. Mi hija mayor salió a decirme que aún estaban terminando de desayunar y que retornara en 20 minutos. También me dio una bolsa con angelitos y pie de queso. Retorné a mi habitación y trapeé un poco, no lo hacía desde hacía mucho. Con mis chicos no pudimos conseguir otra refacción que galletas y bolsitas de snacks. Estuvimos un rato en mi habitación viendo Phineas and Ferb y armando el cubo de rubik.

Un poco antes del mediodía empacamos una pelota y la refacción y nos fuimos a la Universidad, pero por primera vez en mucho tiempo no nos permitieron ingresar. Ibamos a retornar a casa pero nos quedamos mas bien en una parroquia que queda como a medio camino entre mi habitación y la universidad y allí refaccionamos. Estuvimos allí leyendo un poco y jugando con el ajedrez de mi hija mayor. Al mediodía nos dirigimos al Mc Donalds de costumbre en donde almorzamos una vez al mes.

Después del almuerzo retornamos a mi habitación en donde mi hija mayor y mi hijo menor estuvieron jugando Angry Birds y mi hija mediana MahJong, me ayudaron a lavar unos trastes y vimos para finalizar el día una parte de Piratas del Caribe 3. Los fui a dejar como a las 6:15 y retorné a mi habitación a prepararme para mi primer día de labores del año.

Se suponía que nos reuniríamos con mi jefa a las 6:00 en la oficina por lo que me levanté a las 4:30 y salí de mi habitación casi a las 5:00. Como no me gusta ya mucho caminar por la ciudad en horas solitarias tomé el transmetro para el trébol y allí esperé un bus hacia mi trabajo. El bus costó que pasara y aún tuve que caminar de una calzada a la siguiente para esperarlo en una mejor estación. Llegué a mi oficina un poco antes de las 6:00. No había nadie y el compañero que tenía que ingresar a las 6:00 se apareció como a las 6:20.

Cuando estaba esperando el bus hacia mi trabajo había recibido una llamada de mi jefa avisándome que se atrasaría. Al final mi jefa vino como a las 6:30 y estuvimos trabajando en un documento especial del área casi hasta las 9:30. Desayuno -tamal- incluído. Como había traído avena y pan los guardé para el almuerzo. Salí de mi trabajo como a las 4:15 y me dirigí al Colegio de Ingenieros pues es tiempo de pagar impuestos y necesitaba un comprobante de los pagos hechos al mismo durante el año 2011. Me dieron la carta, con un valor mucho menor al que esperaba y me dirigí a mi habitación a donde llegué como a las 6:00. Me pasé luego casi cuatro horas ingresando las –pocas- facturas del año que tengo para presentar mi declaración de impuestos.

El martes entré un poco más tarde al trabajo, como a las 7:30. Un buen hábito que tuve por casi tres años y que había perdido en mi trabajo anterior era el desayuno. De avena. Afortunadamente estoy retomándolo. Había traído una sopa para el almuerzo pero un compañero me regaló un tamal y almorcé con este. Salí un poco después de las 5:15 y me dirigí a mi habitación. En el camino pasé al supermercado a comprar zanahorias y aproveché para proveerme de detergente y un pashte. Un poco después de llegar a mi casa llamé a mi ex para comentarle que quería que conversáramos pero que prefería que los chicos ya estuvieran dormidos, me respondió que los chicos se estaban acostando –no hay escuela aún- alrededor de las 11:00. Me recorté el pelo –ya estaba un poco peludo- y luego estuve viendo la película Route Irish. Muy buena. Como a las 10:30 me dirigí a la casa de mis chicos. No quería andar muy muy tarde afuera. Efectivamente estaban despiertos cuando llegué, armando unos rompecabezas.

Le conté a mi ex esposa que este año la tributación representaría un tema importante para mi este año y que necesitaba que me ayudara con facturas de lo que pudiera comprar con esta modalidad. Me dijo que casi no compraba en negocios formales pero que vería si alguna persona conocida podía ayudarla. Retorné a mi habitación a dormiré pues tenía que venir hoy a las 7:15 a la oficina, había quedado de recibir unos documentos de mi nueva amiga del voluntariado.

Ayer me di cuenta que aún no había confirmado mi asistencia con ningún grupo de visita para el primer semestre del 2012, por lo que empecé a investigar quienes eran los encargados de visita y envié cinco o seis mensajes en Facebook solicitando información de días y horarios de visita. Temprano en la noche me llamó uno de los miembros de mi grupo de las mañanas quien ahora será encargado de visita y me confirmó para visitar los sábados por la mañana. Un poco más tarde otra voluntaria me confirmó en la lista de su grupo para visitar los sábados por la tarde. Con esto estoy completo, ya solo falta ver de qué forma mejoraré mi nivel académico este año.

martes, 3 de enero de 2012

Balance 2011... o lo que el año pasado dejó...

Creo que no puedo resumir -aún- los hechos del año pasado, me imagino que este post irá creciendo con los días, sin embargo, quiero empezar una lista de los hechos relevantes del 2011:

-Completé tres años de haberme restablecido en el país.
-Salí en tv. No me había dado cuenta hasta que un amigo de Portland me escribió contándome.
-Adquirí una nueva portátil. -bastante potente-.
-Perdí una portátil -una de las viejitas ya no arrancó luego de dos semanas de desconección-.
-Perdí mi trabajo en febrero -ya lo sabía desde el 2010-.
-Cambié de trabajo tres veces -el primero por dos días, el segundo por cinco meses y el actual con el mismo equipo del año pasado-.
-Tuve novia -no se si se puede decir novia pero estuve con una chica por dos semanas (y algunos días después)-. Aún la extraño algunos días.
-Aprendí a armar el cubo de rubik -y le enseñé a mis chicos-.
-Volví a recibir en el país a la pareja de amigos de Portland que ha venido varias veces -ellos me trajeron la portátil-.
-Continúo conversando -de vez en cuando- con mis amigos de Portland. Ayer tuve una conversación de casi media hora con mi mejor amigo de esa ciudad.
-Experimenté nuevamente el trabajo de mi carrera universitaria -y no me gustó-.
-Terminé el año trabajando en tecnología -que realmente me gusta-.
-Visité con Patch Adams y su grupo de voluntarios.
-Estuve en una convocatoria de Fábrica de Sonrisas en Jalapa.
-Estuve en la celebración del Aniversario de Fábrica de Sonrisas en Coatepeque.
-Completé dos años de trabajo voluntario con Fábrica de Sonrisas.
-Trabajé en un banco.
-Me asaltaron dos veces.
-Cambié de celular tres veces -dos por asaltos y una por fallo del aparato-.
-Asistí a un taller de Teatro Clowning -y estuvo bien-.
-Asistí a un taller de narrativa -y no me gustó-.
-Asistí a un taller de títeres...

Muy feliz año a los que pasan por acá.

Final del 2011...

El jueves pasado se me ocurrió devolver el favor del regalo del ajedrez electrónico con un cubo de rubik, por lo que planeé ir a realizar el cambio de juegos con mi hija el jueves por la noche, luego el viernes al mediodía, cambiar el ajedrez defectuoso por un cubo de rubik que había visto en el almacén en donde compré el aparatito. Ese era el plan. Salí de la oficina como a las 6:00 y una compañera de mi jefa me ofreció aventón a mi casa. Me dejó en una de las rutas principales cerca de donde vivo -como 8 calles de distancia- y pasé a mi habitación a cambiarme de ropa. Luego fuí a donde mi hija y a el juego de ajedrez que me había dado el maestro de ajedrez de la oficina pero no le gustó. Primero porque tenía las baterías soldadas -eso pasa por dejar un aparato sin usar y con las mismas baterías durante más de un año- y luego porque me comentó que el otro aparato estaba cumpliendo su función. Entonces no hubo cambio.

El viernes por la mañana le devolví el ajedrez al maestro de ajedrez. Ese día almorzamos en el food court del edificio -17 pisos abajo de nuestra oficina- y jugamos un par de partidas de ajedrez. Debo mejorar realmente mi planeación en ajedrez. En el segundo juego llegué a dejarlo sin su reina en un paso bastante temprano y aún así me ganó. Un poco después de las seis me retiré de la oficina y me dirigí al banco pues me dí cuenta por la tarde que era fin de mes y no le había depositado a mis chicos. En el área financiera de Miraflores perdí hora y media entre retirar dinero de mi banco usual y depositarlo en la cuenta bancaria de mi ex esposa. Incluso me tocó modificar el límite de retiro para mi tarjeta de débito pues no me alcanzaba para retirar el monto necesario. Fuí uno de los últimos clientes en ser atendidos en el segundo banco. Me retiré del comercial como a las 8:30 pm. Me dirigí a mi habitación, pasando en el camino a comprar un asado y cené viendo una parte de Cypher. Me acosté un poco antes de medianoche pues había quedado de despertar a mi nueva amiga del voluntariado a las 6:00 AM. Aún dejé unas camisas y calcetines en remojo.

El sábado -último día del año- visitamos el hospital general de la ciudad. Eramos mas de 100 voluntarios y nos repartimos en las diferentes alas del hospital. Con mi nueva amiga y varios voluntarios nos dirigimos al área de tomografía helicoidal, emergencias y -ya solo mi amiga y yo- al área de otorrino, aunque en realidad habían pacientes de traumatología. Los últimos cuarenta y cinco minutos o así estuve con dos chicos que habían sufrido accidentes: Uno había sido tirado por un automovil y el otro había chocado una motocicleta. Estuve haciendo origami y compartiendo historias con el segundo pues resultó ser de la misma ciudad en la que crecí. Por la tarde nos dirigimos con el voluntario que vive en la misma colonia, mi nueva amiga del voluntariado y otro voluntario a almorzar Pollo Pinulito y luego a ver Misión Imposible 4. Como a las 6 o algo así retorné a mi casa. Había planeado conversar sobre FB con mi nueva amiga pero me quedé sin red bastante rápido y me dormí como a las 9:30. Recuerdo haberme despertado con la bulla de la medianoche pero continué durmiendo.