jueves, 10 de mayo de 2012

Jornadas maratónicas de trabajo, again...

El jueves de la semana pasada entré en fase de recuperación de la intoxicación alimenticia.  He estado comiendo la mayor parte de veces en mi escritorio.  Es más práctico y puedo leer algo en internet mientras almuerzo.

El viernes había planeado cenar con el voluntario que vive en la misma colonia.  En horas de la mañana recibí un mensaje de texto avisándome que había muerto la abuela de los voluntarios del grupo de los sabados por la noche.  El abuelo de este mismo voluntario había muerto el día del concierto de Arjona.  Salí como a las seis de mi trabajo y vine a cenar a mi habitación, luego pasé a la casa del voluntario que vive en la misma colonia y nos fuimos un rato al velorio.  Volví a cenar con ellos.  La mayor parte del velorio me la pasé leyendo en el Kindle de una de las voluntarias.

El sábado por la mañana visité el mismo orfanato que las últimas dos semanas.  Estuve la mayor parte del tiempo haciendo un cubo modular de origami y jugando ajedrez con un par de niños.  En la tarde fuí a ver The Avengers con mi mejor amiga del voluntariado.  Terminó la película casi a las 8:00 y retorné a mi casita a tomar té y pan.

El domingo -era el primero del mes-  llevé a mis hijos a Mc Donalds.  No habíamos ido a ese retaurante en los últimos meses porque las promociones no estaban muy atractivas -y estaban dando una piña no muy buena-, esta vez la fruta era mango.  Después de almorzar pasamos un rato a la biblioteca -he estado leyendo un poco de Mi país inventado de Isabel Allende- y luego venimos a mi habitación a ver una parte de Horton hears a Who.  Por la mañana habíamos visto un video de Algebra -ellos hicieron un par de ejercicios-, un video de Phineas and Ferb y mis chicos estan empezando con ejercicios de jaque mate en dos movimientos.

El lunes retorné bastante animado a mi trabajo.  Almorcé en el comedor del otro lado de la calle de nuestro edificio un pollo con arroz -y aguacate- muy bueno.  Por las noches he estado viendo -terminé anoche- nuevamente Route Irish en mi computadora.

El martes llegó a la oficina un tanzano con el que estuve trabajando varias veces cuando era Ingeniero de Soporte.  Pasaron presentandolo a toda la ofician pero por estar mi lugar de trabajo bastante aislado pasaron de mí.  Un poco después llegó la secretaria a comentarme que el africano había preguntado si aún trabajaba en la oficina y fuí a que me lo presentaran.  Habla un inglés bastante correcto.  Se suponía que iba a estar en la oficina martes y miercoles.

El miercoles temprano al saludar al tanzano le comenté que el pollo frito de nuestro país es parte de nuestro orgullo nacional y que quería invitarlo a almorzar.  Al final el compañero A también había planeado invitarlo a almorzar y a la hora del almuerzo nos dirigimos los tres al restaurante de pollo que nos caracteriza.  Estuvimos en este lugar entre almuerzo y conversación casi una hora.  Como ese era su último día en el país habíamos planeado ir luego a ver -en los cines del edificio- The Avengers.

El plan era ese pero no se pudo realizar debido a una emergencia con una funcionalidad que debía probar.  Se suponía que iba a salir del trabajo un poco después de las seis, luego un poco antes de las ocho.  Al final envié el correo con la información requerida a las 2:30 del día jueves.  Después de enviar el correo -mi programador menos favorito se había quedado en la oficina para trabajar el tema- me encerré en una pequeña oficina y dormité hasta las 5:30.  A las 5:30 retorné a mi habitación, planché mi camisa, me bañé y retorné a la oficina.  En la noche había aprovechado para llamar a uno de los amigos con los que compartía casa en Portland y a mi mejor amiga en esa ciudad.

Llegué a la oficina  a las 8:00 y había planeado trabajar la jornada normal.  Tempranito llamé a mis padres y hablé un par de minutos con mi madre.  Hoy se celebra el día de las madres en el país.  Le comenté a mi jefa como había estado la noche y luego estuve cubriéndola en un par de reuniones.  Al mediodía me llamó a una oficina y en una reunión bastante incómoda se disculpó por no responer el teléfono la noche anterior -yo la había llamado a las 22:00 para pedir indicaciones-, por no prever la situación y por no haber dispuesto fondos para cena y taxi de retorno a mi casa.

Digo que fue incómodo porque no me importa trabajar más de lo debido y no me gusta pensar que intercambio mi trabajo por una plato de comida.  En fin, para no darle más vueltas al asunto, me indicó mi jefa que me retirara al mediodía y que pasara a recepción por el dinero que me correspondía a la cena del día anterior.  No quise discutir esto último.  Luego pasé a la oficina del jefe máximo en donde se repitió la disculpa.  Más incomodidad.

Pasé a recepción, recogí el dinero que me indicaron -como cinco dólares- y luego mi jefa también me pagó un pequeño monto que le había prestado el día anterior -otros seis dolares-.  La idea de mi jefa y su jefe creo que era -y no los saqué de su error- que yo no tenía fondos para patrocinarme comida y/o transporte el día anterior.  Fondos tengo -y bastantes, realmente tengo un buffer de tres meses de salario-, pero la verdadera razón de no gastar el día anterior era que usualmente no ceno y no quería luego andar viendo si aplicaba o no el reembolso de gastos.  Igual, no me quise poner a dar explicaciones pues usualmente al tratar de aclarar estos asuntos terminan oscureciéndose más.

Pasé al comercial al lado del edificio donde trabajo, compré un almuerzo en un restaurante chino y luego retorné a mi habitación.  Había planeado llevar unos pantalones de lona a la lavandería -espero no volver a acumularlos nuevamente- pero al entrar a mi habitación me sentí bastante cansado y me recosté.  Me desperté un poco después de las siete.  Sabía que eso era muy probable que pasar y por eso había planeado tabajar la jornada normal.  Me levanté a lavarme los dientes y luego traté de seguir durmiendo.  A las 10 me levanté a actualizar mi blog pues no puedo conciliar el sueño.  Mañana -según indicaciones de mi jefa- entro a la hora normal pero saldré un par de horas antes.  Espero cenar con el voluntario que vive en la misma colonia.  Trataré de volver a conciliar el sueño antes de medianoche.







No hay comentarios:

Publicar un comentario