miércoles, 20 de abril de 2011

Miercoles Santo...

Como había acordado con mis chicos que ibamos a pasar este miercoles juntos me dormí un poco después de medianoche y puse el reloj para las 8:30. Un poco después de las seis algunos de mis vecinos salieron muy animadamente hacia sus labores con lo que me despertaron completamente. Me quedé despierto en mi cama y un poco después de las 6:30 puse en mi compu la otra película que me prestó Alx ayer -The Fighter-. Me gusta como actúa Mark Whalberg y el papel que realiza Christian Bale en esta cinta es también bastante interesante. The Fighter cuenta la historia de dos hermanos que practican boxeo, uno que es drogadicto y que vive aún en el pasado -Bale- y el otro que intenta ingresar al medio -Whalberg-. La historia está muy bien contada y al final de los créditos incluso aparecen los dos boxeadores originales. Terminé de ver la película cerca de las 8:30 y me puse a ordenar mi habitación.

Un poco antes de las 9:30 me llamó mi chico comentándome que habían puesto mal la alarma porque habían estado pintando sus habitaciones el día anterior y que se habían levantado una hora más tarde, que si podía ir a traerlos luego de las 10. Lo tranquilicé y le dije que llegaría mas tarde. Salí a comprar pan y desayuné tranquilamente, estuve leyendo un poco y a las 10:15 me dirigí a traer a mis chicos.

Estuvimos una buena parte de la mañana en mi habitación leyendo y viendo un poco de Phineas and Ferb. Un poco antes del mediodía decicimos ir al lago de Amatitlan y llevar sandwiches para almorzar. Salimos al mercado a comprar lo necesario, preparamos los sandwiches y salimos a tomar el transmetro ya que es en la terminal del sur -CENMA- en donde se toman los buses para Amatitlan. Me preocupó ver bastante gente en la estación -casi parece un aeropuerto- pero afortunadamente los buses para Amatitlan iban relativamente vacíos. Llegamos al lago un poco antes de las 2:00 y alquilamos -3 dólares- una lancha de remos para pasear una hora por el lago, afortunadamente la contaminación del lago no estaba tan evidente en esta ocasión como en la última vez que habíamos ido a remar.

Luego de la hora de remo, en la cual estuvimos a punto de zozobrar pues el piloto de una lancha mucho mayor no nos vió y nos pasó embistiendo -afortunadamente de lado- subimos al teleférico y almorzamos en el parque que se encuentra en la cima de la montaña a la cual conduce el mismo. Después del almuerzo habíamos planeado jugar frisbee pero mi chico propuso que jugarámos ajedrez en un tablero gigante que tienen en este lugar. Estabamos terminando la partida -4:30- cuando nos avisaron que el lugar empezaba a desocuparse así que nos tocó abordar el teleférico en sentido contrario. Mis chicas mayores quedaron un poco decepcionadas pues querían jugar en un parque infantil que está en la cima pero les prometí que en la siguiente ocasión tomaríamos más tiempo para realizarlo.

El bus de vuelta tardó un poco en pasar pero venía bastante vació. En la terminal del Sur les compré unos helados de cono a mis chicos y luego nos dirigimos a abordar el transmetro, como no se puede ingresar comiendo estuvimos un rato esperando a concluir los helados al lado de los monederos de acceso al mismo. En la sección de CENMA donde se abordan buses a los departamentos -Mazatenango, Escuintla, Rethaluleu, etc- había bastante aglomeración y estuvimos escuchando que había jaleo. Mis chicos me comentaron que al parecer era gente tratando de colarse en las filas pues se escuchaban gritos de 'hagan cola' o similares. Un poco después vimos que unos agentes -5 o 6- de la policía llevaban esposados a una pareja. El tipo iba escoltado como por cuatro policías y la mujer por dos -mujeres-.

Cuando iban pasando cerca de donde nos encontrabamos la mujer trató de pedir ayuda a la multitud pero una de las agentes -bastante pequeña- le cubrió la boca para que no pudiera gritar. Les dije a mis chicos que lo mejor es no sumarse a la contemplación general de este tipo de situaciones pues no se sabe si la persona está siendo conducida justamente, me refiero a no agregar nuestro juicio sobre el implicado. Un poco después al ver hacia a donde se había dirigido el grupo noté que el tipo estaba en el piso y un policía municipal estaba pateándolo. De las cosas que se ven únicamente -con ese grado de impunidad- en nuestros países. Mis chicos se terminaron sus helados y abordamos el transmetro, como ya eran las seis de la tarde le dí mi teléfono a mi chica mayor para que llamara a su madre y le avisara que llegarían como a las 7:30, la respuesta fue que si podían llegar a las 8:00. Accedí.

Venimos a mi habitación casi a las 6:00, compramos pan y les preparé té. Estuvimos jugando un poco más de media hora Bancopoly y un poco menos de media hora SCRATCH, luego vimos una parte de Spirit y a las 8:00 los fuí a dejar a su casa.

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