No logré encontrar el Capítulo en Everyday ZEN, juro que me fuí buscándolo en el bus, y cuando regresé a mi habitación fué lo primero que me puse a buscar. Es más, lo googleé, para ver si con google books aparecía la cita -me ha funcionado en otras ocasiones-, pero ni así.
Sífiso fué un rey, me parece o al menos un mito griego, no recuerdo, y no quiero utilizar ahorita wikipedia -no viene al caso-, en fin, lo condenaron a empujar cerro arriba una roca, y cuando llegaba a la cima, empezaba de nuevo el castigo, por toda la eternidad.
En el comentario de Joko -recuerdo- sobre el mito, trataba ella de explicar que todos tenemos un poco de Sísifo, sea esto nuestro trabajo, o nuestra vida, algo que tenemos que hacer una y otra y otra y otra y otra vez, y que a veces -a algunos al menos- nos desespera y esperamos con ansias un cambio, pero que, el castigo no estaba tanto en empujar un dia y otro la roca, sino en esperar que eso cambie algún día. Dice ella que una vez aceptamos la vida tal cual es, el castigo queda atrás. O al menos, es lo que recuerdo, y trato de aplicar, cuando veo algunas cosas en mi vida, como trabajar con veinteañeros y estudiantes, después de 10 años de carrera. O ver a mis peques una vez por semana. O, en fin, mi vida, tal cual es.
Continúo meditando (wuujuuu!!!), espero terminar esta semana -ahora si- la fuente que estoy haciendo. Este fin de semana será familiar: primos y sobrinos en un cumpleaños - o al menos, eso espero- y escribir, escribir, escribir, o por lo menos durante las siguientes siete semanas, quien sabe, de pronto -al fin- puedo tomar el hábito y hacerlo parte de mi vida.
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